Mezquita de Cuatrovitas

Población: Bollullos de la Mitación
Provincia: Sevilla
País: España
Coordenadas geográficas: 37.298185 / -6.183778
Nº inventario: 305


Esta pequeña mezquita rural debió pertenecer a una alquería o pequeña población de la comarca del Aljarafe, situada al oeste de Sevilla. Sus restos están integrados hoy en la ermita de Nuestra Señora de Cuatrovitas, topónimo que ha aparecido con diversas variantes en la historiografía. La mezquita tenía planta rectangular, de 10,50 m de ancho por 12,70 m de largo. El espacio interior estaba dividido en tres naves separadas por arquerías sostenidas por pilares, de 3,09 m de anchura la central y 2,70 m las laterales. Esta estructura básica se ha mantenido en la actual ermita y se puede asegurar que tanto los muros como las arquerías son, en lo esencial, las del oratorio musulmán. A la construcción primitiva se le agregaron, tras su conversión en templo cristiano, sendas crujías a ambos lados, la oriental destinada a almacén y la occidental a sacristía, y un pórtico con tres vanos en su lado sur que alberga la entrada a la ermita.

La primitiva sala de oración de la mezquita tenía acceso por tres puertas, una en el lado norte, que sería la principal, y otras en el centro de los lados oriental y occidental. La primera se conserva en su parte exterior, aunque fue tapiada al colocarse el altar mayor de la ermita en ese lado. Presenta jambas y arco de herradura de ladrillo con un sencillo alfiz rectangular. La del lado oriental está oculta por un nicho, aunque se han descubierto sus jambas en unas prospecciones realizadas en la cara externa del muro. La puerta occidental coincide con la actual puerta de la sacristía, que la enmascara. Donde hoy se encuentra el acceso principal a la ermita debió situarse el mihrab que se destruiría al cambiar la orientación del edificio y establecer por ese lado el acceso, sin duda como expresión del cambio en el uso religioso del edificio.

Las arquerías que delimitan las naves están formadas por arcos de ladrillo enlucido y presentan alfiz rectangular que arranca de las impostas.  Estas tienen forma de nacela y presentan voladizo en todos los frentes de los pilares. Originalmente los arcos fueron de herradura de medio punto, aunque en la actualidad su parte inferior se encuentra recortada presentando forma de medio punto peraltada. Sólo el primer arco del lado oriental, según se entra a la ermita, ha sido restaurado reponiendo su forma original. La nave central se cubre actualmente con una armadura de par y nudillo que, por la disposición de estos, situados al medio y no al tercio de los pares, parece de factura reciente. La cubierta a dos aguas que conforma esta armadura se continúa sobre las naves laterales. Cabe suponer que la cubierta primitiva de la mezquita sería con tres tejados independientes a dos vertientes y con canales de recogida de agua sobre las arquerías, como es habitual en estos edificios. Seguramente las armaduras de estos tejados estarían a una altura más baja que la de la armadura actual de la nave central.

Una particularidad reseñable en esta mezquita es la existencia de un alminar separado del edificio principal. Quizás en sus orígenes existieran muros, como en la actualidad, delimitando un patio e integrando la torre con el cuerpo de la sala de oración, aunque no hay constancia de ello. Las tapias que cierran el patio actual parecen posteriores y en parte ligadas a las adiciones al edificio primitivo. El alminar está edificado con ladrillo y tiene planta cuadrada de 3,25 m de lado. Presenta la puerta en el centro del lado sur con forma de arco de medio punto con unas minúsculas impostas. El interior está ocupado por la escalera que adopta lo forma típica en estas torres, subiendo en giro anti-horario en torno a un núcleo central cuadrado y macizo de 0,90 m de lado. Los tramos de la escalera son de cuatro peldaños cada uno y tienen 0,75 m de ancho. Al llegar a la terraza, el penúltimo tramo de la escalera presenta un quiebro en su mitad, de modo que el último tramo se sitúe en el eje de la torre. No existe garita ni cuerpo alto que cubra este desembarco de la escalera. El interior se ilumina mediante pequeñas ventanas muy alargadas en sentido vertical dispuestas por parejas en cada cara.

Los alzados externos de la torre son todos distintos, siguiendo el modelo de la Giralda, ya que su composición atiende a la ubicación de las ventanas, cuya posición viene marcada por el desarrollo de la escalera. Los paramentos son lisos presentando una serie de recuadros rehundidos que enmarcan las ventanas que se abren en su fondo. Además de estos recuadros se aprecian hasta nueve líneas de mechinales que debieron usarse para la sujeción de los andamios necesarios para la construcción. Los recuadros pueden ser lisos o con arcos tanto sencillos como de lóbulos, siempre pareados para enmarcar las ventanas que siempre son dos por cada cara y en cada nivel. Una doble imposta remata el alminar marcando la altura del antepecho de la terraza.

La cara sur tiene cuatro niveles de ventanas. De ellos, tres contienen parejas de arquillos con cinco lóbulos cada uno. Es posible que existieran columnillas para el apoyo central de los arcos, pero ninguna ha llegado hasta nosotros. El tercer nivel no tiene arcos y solo presenta un recuadro enmarcando las ventanas. El frente oriental tiene sólo tres niveles de huecos, los dos inferiores con arcos de herradura y el superior con arcos lobulados. En el alzado norte hay también tres registros, dos con arcos lobulados y el superior con arcos de herradura. Finalmente, en el frente occidental las dos ventanas inferiores no tienen recuadro ni arcos que las enmarquen. Las dos siguientes tiene arcos de herradura enmarcados. Las siguientes tienen arcos lobulados y existe un recuadro superior sin ventanas ni arcos.
Esta mezquita constituye un magnífico ejemplo de arquitectura religiosa almohade en un pequeño núcleo de población. Sobre todo, su torre tiene el interés de mostrar a escala reducida una libertad compositiva sin duda copiada del gran alminar de Sevilla y en la línea de lo desarrollado por los constructores almohades. Seguramente una mayor investigación de las fábricas que se han conservado enlucidas nos aportaría más detalles e información sobre la forma del edificio original, que no obstante queda suficientemente reconocible.

Antonio Almagro


Bibliografía:
  • Calvo Capilla, Susana, Mezquitas de al-Andalus, Almería 2014.
  • Torres Balbás, Leopoldo, "Alminares hispanomusulmanes", Cuadernos de arte de la Universidad de Granada, 4-6 (1939), 59-89.
  • Torres Balbás, Leopoldo, "Dos obras de arquitectura almohade: La mezquita de Cuatrohabitan y el castillo de Alcalá de Guadaira", Crónica Arqueológica de la España musulmana, VIII, Al-Andalus VI (1941), 204-216.